domingo, 26 de junio de 2011

Sin Rey no hay Fueros


Suena a anarquía. Es como meterse en la máquina del tiempo y plantarse en los años treinta del pasado siglo, pero estamos en el 2011. El alcalde de San Sebastián ha retirado un retrato del Rey del Salón de Sesiones, tras hacer lo propio con la Bandera de todos. Creen que eso es moderno, revolucionario y no sé cuantas cosas más. Simplemente han vuelto a dar otra patada a la historia y a legalidad, la misma que ha permitido a Bildu presentarse a las elecciones y conseguir el gobierno municipal. La Comunidad vasca no tiene arreglo mientras las ideas de María San Gil, Redondo Terreros, Mayor Oreja, Regina Otaola o Carlos Iturgaiz, no sirvan para hacer posible la convivencia. Ese norte no avanzará mientras se consienta que los terroristas estén en las instituciones. Hubo gente que ante lo que hicieron, al respecto, los seis del Tribunal Constitucional, pensaban en la bondad de la coalición, en darles una oportunidad y en no sé que, de hombres de paz. Se han caído con el equipo, los hechos son tan rotundos como lo es su última propuesta, la reducción de la Policía y el Ejército en las tres provincias vascas. ¿Y entonces quien asumirá el orden?, naturalmente los gudaris, ese ejército popular de repúblicas del este pero instalado en el sur de Europa. Muchas maletas seguirán haciéndose para huir de esta limpieza étnica y del miedo que van sembrando, mientras se sigue con la pasividad que permite todo. Los privilegios de los que disfrutan, y también en la cercana Navarra, son consecuencias de los acuerdos entre isabelinos y carlistas que puso fin a la llamada guerra del norte. Los que aceptaron a la Reina Isabel II como su monarca se llevaron a cambio el respeto a los Fueros, desde aquel XIX hasta dos siglos después. Pero si esto es así, si el resto acepto privilegios, lo que no pueden hacer estos de Bildu es romper un Estado porque quieren reinstaurar un sistema dictatorial como los del telón de acero. Ante los últimos movimientos no se hace nada, solo el silencio, el mirar para otra parte y aquí no cabe la carne de gallina. El espectáculo del terrorista Cheroki en la Audiencia Nacional, presentado por el Gobierno como el éxito de su política en Interior, solo nos produce vergüenza y demuestra que así no se puede seguir. La política del avestruz jamás funciona como tampoco guiarse por lo correcto para no molestar. España sigue siendo un paradigma en Europa, con todo lo acontecido y lo que nos queda por contemplar. Y estas tenemos cuando se anuncia el debate sobre el Estado de la Nación, que sale en principio devaluado, con un Congreso maniatado que ni puede presentar moción de censura, ni está el Ejecutivo para una cuestión de confianza, con unos ciudadanos ya hartos y con la incógnita electoral. Suena mejor Noviembre que Marzo para poder poner en consonancia a la calle con la Moncloa y para que de una vez por todas las Cortes Generales sean el centro de la vida política. Cuando el viento africano se desliza lentamente por la Península, aquí no nos quitamos el levante y es que hay cosas que nunca cambian
Ángel  Gil  

domingo, 19 de junio de 2011

Día E

Hace mañana de playa, de tiendas, de rastro donde encontrar esas prendas, de cara a la estación que estrenamos en unos días. La PAU ha terminado como casi el curso, para cientos de estudiantes melillenses, ahora a esperar las notas y los padres y madres a inventárselas para entretenerles. La luna roja apareció desde El Pueblo, este miércoles de eclipse, congregándonos de nuevo a contemplar, que no era tan fría su luz. Respiramos un viento caliente, anunciador del largo y clásico verano melillense. Volveremos a repetir la tradición de las hogueras por San Juan y en esa noche, contemplaremos junto al mar, quien puede más si el levante o el poniente y así saber lo que nos espera en el estío. En sus calles, Melilla se ha vuelto a pintar de blanco, ya hacía demasiado que un buque de la Armada no arribaba, sean como siempre bienvenidos y vuelvan más veces. Los y las guardiamarinas le dan otro aire a esta tierra, esto sí, hace que los comercios se llenen y dejen euros de ganancias. Se celebró ayer, el día E, la fiesta de todos los que hablamos español, y que promovido por el Instituto Cervantes, difunde nuestra cultura por todo el mundo. Tal vez el idioma es el bien más preciado que tenemos y que compartimos con otros, a los cuales ni conocemos, pero que nos hace comunicarnos sin fronteras. Vargas Llosa dio precisamente en Pekín, la bienvenida a los estudiantes chinos a una familia muy numerosa repartida por el mundo.  En nada, la lengua española ocupara el primer puesto desbancando al inglés. El actor mexicano, Gael García, ha elegido la palabra querátano, como la verba más hermosa del español. Le han seguido, gracias y sueño. De la primera decir que, aunque no se encuentra en el Diccionario de la Real Academia Española de la Lengua, significa isla de las salamandras azules. ¿Qué decir de la palabra gracias?, casi lo primero que, no se usa todo lo que se debiera, nos da corte pronunciarla o mejor creemos que como nos merecemos todo, para que mostrar nuestro agradecimiento por cualquier beneficio, favor o atención que se nos dispensa. Casi da igual ya, para niños y adolescentes, puede que como sigan así la hagan caer en desuso. Para aquellos que la interpretan como un signo de sumisión o de inferioridad, nada más lejos de la realidad, su uso nos convierte en personas con mayúsculas. Los sueños, tanto como las gracias, son gratuitos. Nadie se mete en ellos y cuando los recordamos sentimos satisfacción. Suele ocurrir que en lo mejor de los sueños, nos despertamos, echándose a perder todo lo construido, ese lugar especial en buena compañía o elementos, que según los que interpretan los sueños, significa riqueza, desastres, anhelos o inclinaciones. Hace años se hicieron muy populares los atrapasueños, que se veían colgados en los vehículos. Lo interesante es que podamos hacerlos realidad, hay personas que sueñan despiertos, construyen castillos en el aire y se quedan en que pude haber sido y no fue. Soñar si pero sin utopías. Ayer hubo lluvias de palabras entorno a los Institutos Cervantes, algunas son imprescindibles, respeto, amor, justicia, enseñanza y convivencia
 Ángel Gil

domingo, 12 de junio de 2011

Indignados por Trasmediterránea

Esta primavera viene cargada de enfados desde la Corona hasta el resto de los mortales hispanos. A estos entrecejos fruncidos, le recomendamos alguna receta, que al igual que ciertas venganzas se sirven frías, como el gazpacho, algo que se disfruta en las terrazas sevillanas a modo de obsequio de la casa, con pepino de esta tierra que no falte, ahora que ha salido de las neveras y otras sugerencias a base de horas de ocio en la piscina o el mar. En el Parlamento de Estrasburgo, Sosa Wagner, aquel que jugó por nuestras calles, parece que clama en el desierto, blandiendo la hortaliza más popular, frente a la falaz campaña alemana, desde su estética de la pajarita. Europa asiste a su propio rapto, el de preferir la comida rápida a la nuestra, la mantequilla al aceite de oliva, ellos se lo pierden. Pero señoras y señores del Tribunal Constitucional, los hay ganadores, la serpiente de los Bildu, y esto, por cierto, es algo sencillamente indignante. Hasta las redes sociales ha llegado el clamor de la indignación, en este caso de los melillenses. En facebook se mueve algo, bienvenido sea. Se ha creado una página que se denomina Indignados Trasmediterránea Melilla, que supera ya los ochocientos cincuenta amigos y que dice nacer contra el abuso que está realizando la compañía Acciona Trasmediterránea en Melilla. Ponen el ejemplo de un billete PAQ 2 de ida en Viernes para regresar el Domingo, con un coste de 490 euros. Además nunca hay camarotes, por lo que esta plataforma virtual plantea que, cuando se pide alguno de los que están libres, te dicen que sí los puedes ocupar a cambio de pagar 300 euros más. Los melillenses seguimos sufriendo con los transportes, porque somos los españoles que, con mucha diferencia, pagamos los precios más elevados por desplazarnos a otra parte de nuestro país. En una sociedad de libre mercado como es la nuestra no hay lugar para estos monopolios y quien no lo quiera ver ahí tenemos la enorme pujanza comercial que ha adquirido Ceuta, gracias a que existen dos compañías de helicópteros y tres navieras que la unen con Algeciras. No podemos seguir aguantando, es necesario que el tradicional letargo con el que asistimos a los acontecimientos de paso a una protesta ciudadana, sin colores políticos, sino como la expresión de un pueblo que dice que basta ya, a los olvidos, indiferencias, abusos o de tratarnos como de segunda, porque esto ocurre cada vez que hay un mal servicio, o cuando no se sabe a qué hora salen o llegan los buques o por las largas travesías en barcos demasiado viejos, o por concursos desfasados para este siglo XXI y nosotros, como corderos sometidos al silencio, pagamos y lo hacemos más que nadie, como si nos sobrara. La reciente y feliz aparición de la compañía aérea melillense, Airmel, supone un respiro y también, tal y como han anunciado por sus tarifas, un alivio para nuestra cartera. El pasado verano, por facebook, se nos convoco a los melillenses a una concentración para protestar por lo que acontecía en la frontera, fuimos pioneros en cuanto a la indignación, tuvo un notable éxito y el manifiesto que allí se leyó, constituyo el ejemplo de cómo los melillenses clamábamos por una dignidad que algunos querían echar abajo. Es un precedente que hoy vuelve a estar vivo

Ángel  Gil

domingo, 5 de junio de 2011

PAU

Estamos en plena PAU (Prueba de Acceso a la Universidad) o selectividad, como popularmente se la sigue llamando. Esto se traduce en encierros en casa, o más o menos, de aquellos que rondando los dieciocho años quieren hacer carrera. Pero no solo para los examinandos, sino para las sufridas familias, que parece como si se examinaran, que guardan silencio para que sus hijos estudien y que deberán hacer más números si quieren mantenerles estudiando en la Península. El presupuesto para sufragar colegio mayor o un alquiler es tan alto que no todos pueden. Es el éxodo silencioso de los melillenses que deberán hacer las maletas para cursar estudios superiores y que nos merma de habitantes esta tierra, dejando la franja de edad, entre dieciocho y veinticuatro, prácticamente en cuadros. Muchos serán los que una vez licenciados opten por abrirse camino allí donde estudiaron, regresando por aquí en vacaciones, y otros, ya con una formación, retornaran. Hasta el día 14,  son jornadas de nervios o de miedos insuperables, de histerismo, de noches en vela o de amaneceres de madrugada para ponerse delante de un libro, y así lograr esa puntuación que permita entrar en ese corte y hacer lo que uno desea y en la Universidad soñada. Recuerdo que me toco hacer la selectividad en la Facultad de Derecho de la Complutense, ¿casualidad? o tal vez, fue ese lugar el que me hizo superar, de una vez por todas, la prueba con más ganas y poder quedarme entre sus muros. Así fue gracias a Dios. A la salida una cabina me ponía en comunicación con mi familia, que esperaba, como lo hacen las de los toreros, para saber cómo era de astifino el examen o si era tan rebuscada que iba a por el cuerpo. Hay una fórmula, que corre estos días por ahí, la cual establece que para obtener un catorce de puntuación
(el diez de hace años), el sesenta por ciento es de la nota media del bachillerato y el cuarenta de la nota media de todos los ejercicios. Hay una primera fase o prueba general obligatoria con un primer ejercicio de lengua española y literatura, un segundo de idioma extranjero, un tercero de historia y filosofía y un cuarto, de asignatura a elegir por quien hace la selectividad, ya la segunda fase es una prueba voluntaria para subir nota. La actualidad informativa del último año o las conmemoraciones, volverán a ser indicativo de lo que puede caer. Muchos sueños se estarán fraguando estos días, atrás quedan las aulas que han sido parte de su vida, para empezar a escribir un futuro. En Octubre se volverán a llenar las facultades o escuelas, en el Campus, en la Uned o en otras provincias. Para los que se van, será descubrir ciudades, conocer a personas, alejarse por un tiempo de Melilla y de sus familias. Será el momento de apreciar lo que atrás se deja, el plato de comida de casa, ese coche que te lleva o recoge de cualquier sitio y la despreocupación de que todo te lo dan para pasar a afrontar, ya solo, el día a día. Mucha suerte en la PAU
 Ángel  Gil