domingo, 31 de marzo de 2013

Intolerantes


La Semana Santa que hoy finaliza y que da paso a la Pascua de Resurrección se ha caracterizado en Melilla por una mayor afluencia de público en los diferentes desfiles procesionales, lo que sin duda da aliento a los cofrades, portadores y costaleros en su esfuerzo por sacar los Tronos. En lo meteorológico se ha mantenido, salvo el Domingo de Ramos en el cual no salieron ni la Pollinica ni la Esperanza, aunque con la mirada puesta en el cielo y en las informaciones del tiempo ante el temor que el temporal de lluvias que descargaba en el sur de la Península llegara a esta costa. Eso al final no ocurrió, aunque se sigue con la incógnita de la amenaza de precipitaciones para la presente jornada. Pero sin duda que el hecho más comentado en todos los círculos de la Ciudad han sido los insultos que, un grupo formado por cuatro hombres, dirigieron el pasado Viernes Santo, durante su Estación de Penitencia, a la Virgen de la Soledad en la calle López Moreno de Melilla. Un buen ciudadano, cliente en ese momento del establecimiento hostelero, recriminó la actitud a lo que fue respondido con lanzamiento de botellas, vasos, platos, sillas y mesas, ocasionando hasta seis heridos. El desconcierto que se creó llevó a situaciones de ataque de nervios y ansiedad sobre todo en los más pequeños, mientras familias corrían en estampida buscando un lugar seguro. Los autores de tan lamentable intolerancia están detenidos. En la mañana de ayer, Sábado, mientras era el tema de tertulia en Melilla y en las redes sociales, había algunos que trataban de ocultar la realidad, minimizándola y lanzando balones fuera como si de un mal partido se tratase, para en la tarde y a regañadientes, aceptar la evidencia ante la reacción popular y la publicación en los diarios digitales nacionales de las ofensas a la Virgen de la Soledad. Aquellos que han repetido, desde el momento en que sucedían los hechos, que no pasaba nada para luego rectificar que sepan que ya es tarde y que han caído en el más absoluto de los ridículos. Actuar como el avestruz nunca ha sido una buena solución para afrontar los problemas cuando han tenido tiempo para tomar las decisiones que todos esperábamos. El hecho es tan sumamente grave que se merece que la Ley caiga sobre quienes lo perpetraron además de una rápida respuesta, en general, de la sociedad melillense y en particular de la Cofradía de la Soledad y de la Agrupación de Cofradías, cuyas respectivas Juntas de Gobierno, ya han debido emitir un comunicado desaprobando los insultos y altercados, así como personarse como acusación particular y popular, además de promover un acto de desagravio a la Virgen de la Soledad. Merecedora de aplauso ha sido la postura que ha mantenido la Comisión Islámica de Melilla condenando estos hechos. Melilla siempre se ha caracterizado por una modélica convivencia, basada en el respeto, entre las diferentes religiones que la componen. Por lo que lo acontecido la noche de autos en nada favorecen esta sociedad que nos hemos dado exclusivamente los ciudadanos. La intolerancia no tiene cabida en un Estado moderno ya que quienes adoptan esos caminos se apartan de la convivencia y libertad religiosa
Ángel  Gil

domingo, 24 de marzo de 2013

Tiempo de torrijas



Semana laboral corta, la que estamos a punto de comenzar. Es Santa, de vacaciones y de abierto precisamente por lo mismo, de reencuentros, de oraciones, cirios, tronos y Oficios, un paréntesis entre la rutina que nos sirve para romperla. La sentencia a un Justo por el beso de la traición. Siete palabras caminando por la vía dolorosa o al pie de una cruz. El buen ladrón que pide un recuerdo cuando llegues a tu Reino. Lo viejo y lo nuevo, la muerte y la vida. Cada persona recordara estos días de una manera, para unos vendrá con ese olor a bacalao que sale de la cocina, en potaje o con tomate o en las mil formas que las recetas cuentan con permiso portugués, para otros es la imagen de soledad que envuelve las calles de las grandes capitales cuando hay días libres y entonces, llegas pronto a todos sitios aparcando la palabra colas asociada a restaurantes o a otros lugares de ocio. Algunos viajaran a distintos destinos o a la casa de segunda residencia en un éxodo que, tal vez con la crisis, será menor que otros años. Palmas y ramas de olivos, en este Domingo, para dar la bienvenida, colgándolos de balcones o terrazas hasta el próximo año. Mañana de Pollinica y Esperanza, despertando por Batería Jota, para bajar a ese encuentro popular del Parque Hernández, mientras la música da paso al himno legionario. Un día donde dicen que quien no estrena no tiene manos. En el sur también es tiempo de mantillas para recorrer los Monumentos y salir en procesión. Tardes de monas mientras saboreamos un café o un chocolate y conversamos. Estamos en una semana donde en las cocinas, se hacen sencillas torrijas, despacio, con amor, como un rito para luego ser compartidas, con su leche o su vino, con azúcar y canela a discreción. De origen medieval y cuna monacal, para emplear el pan sobrante, a la que la impronta enriquece. Usos y costumbres que van pasando las generaciones para hacerla popular. Tiempo de esperas para ver salir a un Trono, de incertidumbre mirando a un cielo, de lágrimas de emoción o de desilusión si al final no sale la cofradía. Y allí dentro, horas y horas, en un año, de trabajo, esfuerzo, fe y hermandad. Primavera de Marzo, con el viento del mes, de tardes más largas y amaneceres tempranos. Los idus de Marzo ya han llegado, pero aún no han acabado. En estos tres días venideros parece que todo se deja ya para Abril, mientras se ralentiza el tiempo. Esta mañana volveré a verme de Tarsicio con una palma en la mano, mientras iba en procesión con mis compañeros de La Salle. Tiempo de torrijas, de luces, fuego, agua y oleos, de sacrificios y Pasión, de lavatorios de pies y de unas manos de prefecto que no lograron ser limpiadas. Recuerdos de caídas y de palabras de Verdad. Tiempo para vivir
Ángel Gil

domingo, 17 de marzo de 2013

El Papa del Sur

 
La Ciudad Eterna ha sido sin duda, en estos días, la capital del mundo. Millones de ojos y oídos estábamos pendientes, a través de prensa, radio, televisión e internet, del humo que salía de una chimenea del Vaticano. Ha sido el Conclave de las redes sociales y sin embargo, se ha mantenido el ceremonial para la elección de un Papa. A las 19,07 horas del miércoles 13 de Marzo, la fumata blanca anunciaba al sucesor de Pedro. Nadie en ese momento, a excepción de los cardenales que permanecían bajo llave en la Capilla Sixtina, conocían su nombre y procedencia. Las quinielas seguían pero también se repetía un dicho que ha vuelto a hacerse realidad, quien entra Papa sale Cardenal. La explosión de júbilo en la Plaza de San Pedro iba subiendo mientras seguía saliendo, con fuerza, un humo cada vez más blanco. Se esperaba con ganas, y bajo la lluvia, conocer al electo que ya había pasado por la Sala de las Lágrimas, dando un sí incondicional. Los que estábamos a bastantes kilómetros de distancia , escuchábamos la radio con añoranza de poder ser de nuevo corresponsal. Las obligaciones nos hacían encender y apagar el transistor, pero de pronto un whatsapp saltaba en mi móvil, ya se conocía el nombre del Santo Padre, Francisco. Las dudas saltaban de nuevo, de donde seria, la edad. Puse de nuevo la radio y oía su voz, entonces, y aquí es donde la radio adquiere todo su poder, renacía la magia del medio. Es instintivo que a la voz le pongamos cara, rasgos, que la califiquemos de fuerte o de joven, incluso que se piense por cómo usa el idioma. Sentía curiosidad por llegar a casa y verle en televisión. En los breves momentos que permaneció, Su Santidad, en la logia de la Basílica Vaticana, nos estaban llegando mensajes, parecía tímido y al instante rezo un Padrenuestro, habló, entonces transmitió sencillez, cercanía, a pesar que como el mismo reconoció le fueran a buscar al fin del mundo, demostrando sus dotes de comunicador que en las últimas horas se han reforzado, cuando ha recibido en Audiencia a los seis mil periodistas acreditados en el Conclave, pero sobre todo se los ha ganado con un lenguaje claro y directo. Los digitales, primero y las portadas de los diarios, ya del Jueves, se centraban en que es Jesuita y argentino. Su lengua materna es la misma que la nuestra, solo que con ese acento porteño. Ya sabemos de su humildad, al decirles a los cardenales que Dios les perdonara por haberle elegido, al coger un microbús o al ir personalmente, ya siendo Papa, a pagar el hotel donde se alojó en Roma los días previos a la elección, ahora nos llegan imágenes de su país denunciando la explotación humana. Como buen Jesuita es predicador y además, en su caso, siempre prefirió que le llamaran Padre Jorge. Es bueno que se recuerde la doctrina de la Iglesia o la de algunos de sus miembros, como ese otro Jesuita, el Padre Rubio, aquel Santo que se dedico a los más desfavorecidos de Madrid
Ángel  Gil

domingo, 10 de marzo de 2013

El largo viaje


Fin de semana de intensas emociones, de recuerdos de toda una vida que han pasado como en un segundo. Se está y se deja de estar, es la fragilidad humana. La eternidad es otra cosa. Las filas de sillas se van cayendo tal vez como las fichas de un domino y de pronto, te encuentras en primera, pero hay otras detrás. Surge el silencio sonoro, decorado de lugares y donde aparecen personas, instantes vividos, momentos realizados y otros tantos que aún quedan ahí. Por eso amanece cada día para construir, para proyectar la obra, tu yo a este mundo. Lo interesante es que en el libro encuentres muchas páginas y poner negro sobre ese blanco, con tachaduras, borrones, donde no se extienda el tipex y que lo llenes de sueños, de trabajos, de personas que merecen la pena, con las que aprendes. Que interesante es que falte tiempo y que la palabra ilusión no nos abandone, como cuando dábamos los primeros pasos y descubríamos ese olor a mar en el puerto en tardes de verano mientras la radio de un coche sonaba. Esos balonazos que daban unas piernas incansables que apenas levantaban del suelo o jugar en la calle, y acompañar una guardia de Domingo con tele en blanco y negro Mañanas de sábado, a los pies del Ángel, de agua sobre mármol, un cepillo frota unas letras y a los pies, una oración y una flor a quien me llevó dentro. Todo es como un billete que te regalaron para asistir a un espectáculo en el que tú eres el protagonista, donde nadie te da guiones, donde surgen cosas que ni te esperas mientras sientes que eres capaz, te descubres a cada paso y al final caes, te levantas, pero siempre como un alumno. Aquí no vale la monotonía, el aburrimiento, el ser holgazán, las miradas que a unos ojos evitan, la distancia, un ombligo como centro, el olvido, la mentira o la falsedad. Crean en el compañerismo, en ese hombro donde apoyarse, en la risa que nada cuesta, en la palabra dada o en la seriedad en el trabajo. En este Domingo pienso en lugares, Batería Jota, Álvaro de Bazán, o en el Grupo Orgáz, en unas ventanas donde un monaguillo soñaba, en un balcón donde pasaba horas mirando la casa de la niña que amaba, en las flores que en un jardín se pueden cuidar, en ese dormitorio donde orar, en esa Avenida que, cuando era peatonal servía para que tantas parejas se unieran, en el Ayuntamiento, con sus largos pasillos donde solo tus pasos se podían escuchar, y en mamá. Mi reconocimiento a todas aquellas personas que desde Agosto, tanto en Málaga como en Melilla lucharon desde la medicina por una vida, en largas horas de hospital. Gracias a los amigos que ahí han estado con sus llamadas, con esas palabras de aliento, con manos o con abrazos fundidos. Los recuerdos son la siembra de lo que dejamos. El viernes, mi padre hizo su viaje más largo, se quedo dormido y se fue a la morada que El tiene preparada para los suyos. Desde allí intercede por tu mujer, esa compañera de tantos años, hija, nieta, por Maricarmen y por mí. Allí seguro que no hay futbol ni enfados por un mal resultado. Es otra historia Papá
Ángel  Gil