domingo, 24 de octubre de 2010

Compañeros de cama


 
Estamos en época de Presupuestos y empiezan de nuevo a ocuparse las camas políticas con extraños compañeros. Los más solicitados son los nacionalistas, escasean pero son cruciales, conocen su fuerza, tienen algo, y saben venderse en ese zoco en que han convertido al Congreso. Ahí nunca se puede bajar la guardia ni tomar como enemigo pequeño al contrincante, sobre todo cuando están resabiados, no solo miran al cuerpo, sino que derrotan, empitonan y cogen. Hay mucho don Tancredo suelto tanto como confiados que a golpe de encuestas creen tener asegurados los próximos cuatro años, con la que está por llegar y con lo que vamos a soportar los electores. ¡Hay Señor, Señor, que tendrá el sillón!. Las minorías nacionalistas del Congreso han soltado aquello de alú el último y es que se las pelan, negocian en pasillos, en salones y en torno a un almuerzo por Zorrilla. Los presupuestos tienen muchos novios y ¿si no se saca ahora para cuando lo vamos a dejar?. El PNV es el adelantado, marca estilo y quiere volver a Ajurianea, ¿con quién?, con quien sea, pero si esto da igual. Han logrado el traspaso de veinte competencias a cambio de dar estabilidad al Gobierno en lo que resta de Legislatura. Fíjense lo bien que le ha salido a Rosa Aguilar pactar y de nuevo pactar, ha dejado lo del programa, programa, y su Córdoba la llana, por integrarse en la casa común de la izquierda, de ahí a Sevilla y en AVE a Madrid, para respirar otros aires y ponernos a todos verdes. En CIU se frotan las manos y piensan ya caerán, que próximos están los comicios. Y al sur del sur, las afortunadas Canarias y su Coalición que se mueve más que los vientos alisios y que son únicos en esto de bailar la yenka, izquierda izquierda, derecha derecha, adelante, atrás, un, dos, tres. Ahora el presidente de Canarias, Paulino Rivero pide que se incluya la Ley de delimitación de espacios marítimos canarios, también a cambio de dar su apoyo a las cuentas públicas que ahora se tienen que debatir. El asunto es que no se puede hablar de un mar canario, porque según la Constitución el mar territorial es de dominio público estatal. Por tanto Canarias es un archipiélago de Estado y no un Estado archipelágico. Mientras todo esto ocurre nuestro Mar Territorial en Melilla sigue sin delimitarse, y así hemos asistido, también impertérritos, a lo que hace pocos días le sucedió al barco rápido. Estamos a la espera de la oportuna respuesta parlamentaria. Esta semana hemos tenido hasta crisis de Gobierno, cambios, salidas, lo antiguo que vuelve, ¿tal vez sin acritud?. Ahora podremos comprobar si aquellos jarrones chinos…, claro que tienen su sitio, por mucho que alguno diga que no. Y es que los clanes siempre funcionan. Mientras el ciudadano sigue con sus hipotecas, haciendo más números que en el cole, estirando los euros y con las mejores ministras de economía del mundo, que son las amas de casa. Esto aún los españoles no lo hemos patentado, pero continúan sin descanso ejerciendo, ¡ah! y sin un céntimo ni seguridad social.

Ángel  Gil

No hay comentarios:

Publicar un comentario